La liberación de la Madre Tierra no está en negociación

Comunicado de la liberación de la madre tierra

17 de mayo de 2017 

El proceso de liberación de la Madre Tierra del norte del Cauca comunica a los pueblos del mundo y a la opinión pública que este proceso no se encuentra en negociación con ninguna instancia del estado colombiano.

Si bien en días pasados las autoridades indígenas del norte del Cauca dieron a conocer que se reunieron con el Vicepresidente de Colombia, general Naranjo, para discutir el tema de la sustitución de cultivos de uso ilícito y el capítulo étnico de los acuerdos de paz, en donde se tocó el tema de la liberación de la Madre Tierra, eso no quiere decir que el tema esté en negociación.

Desde el principio las comunidades que estamos liberando la Madre Tierra hemos manifestado reiteradamente que “no tenemos afán” y que “al perro no lo capan dos veces”.

Ya tenemos experiencia suficiente de que un acuerdo es una mentira y un incumplimiento más y por eso no volveremos a caer en errores del pasado.

Valoramos la declaración de la ACIN en la que afirma: “reiteramos que no existe ningún compromiso ni con la Alcaldía de Corinto, ni con el Vicepresidente de la República, ni con ninguna otra entidad de no realizar acciones legítimas de Liberación de la Madre Tierra.” Consideramos que así debe ser y cualquier asunto relacionado con la Liberación debe ser consultado con las comunidades liberadoras.

Reiteramos nuestra palabra, expresada en el documento Libertad y alegría con Uma Kiwe (Madre Tierra:

  • No tenemos afán. Cuando llegue el momento de “negociar” será dentro de las fincas y el único trato aceptable será su libertad. Ese día ya no serán fincas, serán Uma Kiwe.
  • No vamos a salir de las fincas. No vamos a negociar proyectos o a recibir nada distinto que no sean las fincas que ahora ocupamos (y las que vienen).
  • Este es un proceso autónomo de las comunidades caminando los puntos de lucha del CRIC. Estamos acompañadas de nuestros cabildos. Los puntos de liberación caminamos de la mano.
  • No vamos a dejar que nos dispersen. No tenemos voceros externos, nosotras y nosotros mismos nos voceramos. Y vamos a estar pendientes de que nadie se aproveche de este proceso. El sudor y las ampollas, las heridas, los tuertos y mutilados, los compañeros y compañeras judicializados, los muertos y sus familias nos hablan patente: que nadie negocie con nuestra lucha.
  • No hablamos solo de reforma agraria, necesaria por cierto, es necesario ir más allá: la Tierra no aguanta la raspada de la olla, el tal extractivismo. Lo que le pasa a la Tierra en estos tiempos no son fenómenos naturales, es su voz y sus gestos expresando que no aguanta este modelo de desarrollo. Para sostener el actual nivel de consumo se necesitarían dos planetas Tierra y acostumbrarnos a vivir en medio de catástrofes climáticas. Son necesarias relaciones otras entre la gente y con Uma Kiwe. Es necesario restablecer el equilibrio de la vida: liberar la Tierra.
  • No renunciamos a los acuerdos que nos han incumplido: deben cumplirse. Sin embargo, estamos liberando la Madre Tierra porque está esclavizada. Si el gobierno hubiera cumplido con los acuerdos firmados, de igual manera estaríamos liberando la Madre Tierra, porque hasta ahora no hay ningún acuerdo que diga que Uma Kiwe va a descansar en libertad (ni es lo que buscamos porque sería uno más incumplido).

Proceso de liberación de la Madre Tierra

Pueblo Nasa, Norte del Cauca, Colombia