Incauca y el ejército de Colombia siguen atacando
Alerta: El eje del mal trama nuevos ataques contra nuestro proceso
En el día de hoy, desde las 5 de la tarde, hasta las 6 y pico, se escucharon fuertes explosiones cerca de la casa de la hacienda Miraflores, Punto 2 de la liberación de la Madre Tierra en Corinto, norte del Cauca, Colombia.
El terreno está completamente despejado porque todos esos terrenos ya han sido liberados de caña. En la casa permanece el ejército colombiano, que cuida la propiedad privada del ingenio Incauca, a nombre de quien figura esta hacienda. Muy raro que en una zona sin caña, con completa visibilidad, y donde solo vive el ejército se presente este tipo de explosiones. ¿Qué traman Incauca y la “fuerza pública”?
En las últimas semanas no cesan los enfrenamientos entre el ejército y los grupos armados que se mueven en la región, poniendo en riesgo la vida de liberadoras y liberadores de la Madre Tierra que quedan en medio del fuego cruzado; la semana pasada un soldado apuntó su fusil contra una liberadora del Punto 1, toda la comunidad liberadora se movilizó en su respaldo, e hicieron marchar a los soldados que estaban en el lugar.
En las fincas en proceso de liberación, 13 hasta el momento, la tensión crece día a día por la militarización, movimiento de grupos armados y amenazas.
Desde que las compañeras vacas fueron masacradas en Canaima hace tres meses, no cesan los ataques contra la liberación de la Madre Tierra; al contrario, aumentan en intensidad y coordinación. Por eso consideramos que las explosiones de esta tarde son una nueva maniobra del eje del mal, Incauca, Asocaña y el gobierno colombiano, para fabricar nuevos ataques. No nos dejaremos provocar ni intimidar.
Pero en el mundo no solo existe el eje del mal. Agradecemos el gesto de acompañamiento y apoyo que por estos días muchas luchas y procesos nos han manifestado desde muchas partes del mundo.
Y porque nos dicen #LaLiberaciónNoEstáSola les decimos una vez más que pase lo que pase aquí seguiremos liberando la Madre Tierra.