Hay mucha tierra para vivir y liberar

El 20 de agosto de 2018, mientras en La Laguna, Caldono, sectores de comunidades nasa y misak guardaban aún vivo el recuerdo de una triste confrontación por tierra, y el pueblo misak alistaba una marcha para denunciar la situación, la liberación de la Madre Tierra avanzó hacia tierra plana y construyó ranchos para quedarse a vivir en la hacienda La Albania, uno de los siete puntos de liberación desde el norte del Cauca.

La historia empezó el 27 de octubre de 2015. Las comunidades de Lopezadentro, Caloto, entraron, cortaron caña, formaron grupos de trabajo, sembraron, dialogaron para liberar en conjunto con otros pueblos, cosecharon, comieron, compartieron comida para las movilizaciones del CRIC y para la Marcha de la comida, y esperaron. No vivieron en la hacienda, como los otros puntos, sino que desde la vereda la visitaban para hacer los turnos.

En Vamos al corte, programa radial del proceso de liberación de Uma Kiwe, cuenta una liberadora: “la minga de hoy (20 de agosto) era la cortada de la caña, hacer nuestras casas para los niños que vienen después, eso se está haciendo ahora, hay bastantes casas y las que faltan. Llevábamos mucho tiempo pero no habíamos hecho las casas; en parte ya tenemos el revuelto, plátano, yuca, se ha cosechao maíz, pero no teníamos las casas, hasta ahora hay unas 20, un nuevo barrio. Nos tienen en fama que somos todo lo malo, que vengan, que vengan y miren si es que tenemos armas, acá siempre nos encontrarán con el machete, el barretón, todos los implementos para hacer las casas, el machete para tumbar la caña, el barretón para hacer los huecos, para sembrar”.

Agrega la compañera, en Vamos al corte, una palabra sencilla y clara para responderle a Asocaña y sus esbirros que dicen que ellos son el progreso de la región: “la verdad es que de la caña uno no puede vivir. Lo que se ve ahí es para la multinacional y ellos se hacen la plata allá y uno queda con lo mismo, encambio el plátano uno lo puede consumir, con la yuca uno puede sostener a la familia, es por eso que uno acaba (corta) la caña. Ahí estamos y vamos a seguir en la lucha”.

Hemos sido muy mentados

Se habrán fijado quienes viven al pendiente de las redes que en estos días en distintos medios la liberación ha sido muy mentada. Por un lado, se ha dicho que el pueblo nasa habla de liberar la Madre Tierra pero agrede al pueblo misak, “qué tipo de liberación es esa” se nos ha preguntado. Se refieren al conflicto en La Laguna, Caldono. Por otro, que en predios del ingenio Riopaila Castilla, los indios que hablan de liberación andan encapuchados quemando maquinaria y caña. Como ven la lucha también es en los medios. Bueno, Asocaña pretenderá que si la gente va a quemar cosas va a andar por ahí con la cara descubierta para que sus drones y comunicadores sociales, o de El Tiempo, que meten entre la policía y ejército, retraten a la gente para judicializarla. Un poco de sentido común, señor Mira.

Ante lo que se viene diciendo, para el Proceso de liberación de Uma Kiwe, PLUK, es claro que la liberación es una pelea directa contra el capital. Asocaña, agencia nacional de tierras, centro democrático, comando sur, usaid, Néstor Humberto, Incauca, Riopaila Castilla son todos parte de la misma orquesta a la que hay que frentear.

Otra compañera liberadora, también en Vamos al corte, afirma: “El problema que nosotros tenemos es con el estado, con los grandes industriales, los grandes ricos de este país, y nosotros entre pobres ponernos a pelear ahí sí no. El estado es estratégico para ponernos a pelear entre nosotros mismos. Si no pensamos las cosas estamos cayendo en el juego que nos ha puesto. Las comunidades deben de abrir un diálogo, están peleando entre pobres, entre indígenas. Esa pelea no debería ser, con los que debemos pelear es contra otros. El estado está feliz de verlos peleando, mientras ellos van haciendo sus estrategias. Con las trampas del estado debemos tener la madurez para no caer”.

Con lo cual queda muy claro para el PLUK que el de La Laguna no es un conflicto entre el pueblo nasa y el pueblo misak. Se trata de un conflicto entre comunidades nasa y misak que habitan el territorio de La Laguna, tierra de montaña sobre la Cordillera Central. En otros lugares estas comunidades conviven sin problemas. En el resguardo indígena de Jambaló, 90% nasa, hay población misak que vive en las veredas de Monterredondo, Zumbico, Loma Gorda, Barondillo. La comunidad misak ha tenido representación en la autoridad del cabildo en varias ocasiones. En 1994 el gobernador fue un misak y dos años más tardes fue elegido como alcalde municipal. En Lopezadentro, Caloto, el pueblo nasa y el pueblo afro viven en el mismo resguardo. En 2012 un afro fue elegido como gobernador del resguardo, mayoritariamente nasa.

Con todo el respeto por la comunidad nasa y la comunidad misak de La Laguna, que además de todo lo vivido todo mundo los insulta por redes (anti)sociales, nos parece importante decir que ese conflicto ha sido atizado desde afuera. Desencadenó en una confrontación en donde bien podría haber convivencia, igual que en otros territorios, igual que lo habían hecho antes, sin necesidad de la mediación del estado, responsable directo del conflicto. En el Putumayo comunidades nasa han venido reclamando la creación de su resguardo y el gobierno no les ha parado bolas. ¿Por qué tan diligente en La Laguna? Ahora el estado y muchos políticos se pronuncian en favor el pueblo misak con lo cual dejan el incendio prendido. Será la sabiduría política de las dos comunidades la que lo apague y reconstruya lo que un fuego externo tanto daño provocó.

Dónde libera la liberación

Como hemos dicho, se nos ha preguntado por qué la liberación de la Madre Tierra agrede a otro pueblo hermano, como si se tratara de una verdad histórica por confrontar. En Vamos al corte, una compañera liberadora declara: “Nosotros estamos liberando en los territorios esclavizados por el monocultivo de la caña. En las fincas que estamos liberando vemos que es caña y caña. Empieza en el Cauca y temina en el Valle. Las fincas que hay que liberar son fincas grandes y de monocultivo, que no hacen bien sino mal al territorio. Los ricos dicen que dan desarrollo, de qué desarrollo hablan si están acabando con el planeta, las quebradas las están secando, están echando químico. Es necesario mirar cual es la tierra a liberar. La liberacón no tiene nada que ver con enfrentarse entre compañeros, eso no es. Liberar es descontaminar, dejar que el monte vuelva, es dejar que los árboles crezcan, que las quebradas se enmontezcan. La liberación es enfrentarnos con los grandes. Las fincas que estamos liberando son de los grandes industriales que siembran caña no solo pa panela sino para agrocumbustibles. Liberamos para que la Madre Tierra vuelva a ser como antes, crezcan plantas, árboles, haiga comida, no solo pa nosotros sino para todo el pueblo”.

Hoy, ante la pregunta dónde libera la liberación, La Albania responde construyendo sus ranchos y cortando la caña en una gran finca en tierra plana llena de monocultivo. Al tono de la juventud dice: “Por aquí es pa allá”.

Cuando hace 30 años las comunidades recuperaron El Pílamo, hoy resguardo de Lopezadentro, el pueblo misak llegó a apoyar al pueblo nasa. Recuerda el mayor Julio Tróchez, viejo recuperador tierras, señalando el potrero donde fue aquella minga: “esto se puso azuliiiiito”. Hoy ese potrero es una parcela con frutas, yuca, rascadera, plátano. Gracias pueblo misak por lo que ayudaron a forjar. Les invitamos nuevamente e invitamos a otras comuniadades nasa, hay mucha tierra para liberar y vivir.

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El 23 de agosto el esmad y la policía intentaron desalojar a la comunidad y destruir los rachos. Llegaron comunidades vecinas y otros puntos de liberación a apoyar. En poco tiempo la liberación logró expulsar a 400 esmad y policías. En la retirada dispararon y asesinaron un liberador, Fredy Julián Conda. Es la respuesta del estado y el poder cuando tienen miedo.

Proceso de liberacion de la Madre Tierra
Pueblo nasa, norte del Cauca, Colombia.
23 de agosto de 2018.

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